El modelo es un homenaje al más poderoso V8 en la historia de Ferrari.
Su motor ha sido premiado cuatro años consecutivos como «Best Engine of the Year» y elegido el Mejor Motor de los últimos 20 años.
Ya es un hecho. El V8 convencional más potente de la historia de Ferrari está en Chile. Se trata del F8 Tributo, la nueva berlinetta con motor central-trasero, cuyo nombre representa la máxima expresión de este tipo de vehículo y, al mismo tiempo, un reconocimiento al motor V8 del Cavallino Rampante más potente de todos los tiempos. Es el mismo motor premiado como «Best Engine of the Year» durante 4 años consecutivos (2016, 2017, 2018 y 2019) y galardonado como el Mejor Motor de los últimos 20 años.
Con sus excepcionales 720 CV y una potencia récord específica de 185 CV/L, este motor es el más prestacional jamás construido para un Ferrari de serie, y se convierte en un punto de referencia absoluta, no sólo para los turbo, sino para los superdeportivos. Su aceleración va de 0 a 100 km/h en solo 2,9 segundos, alcanzando una velocidad máxima de 340 km/h.
El motor V8 de Ferrari es sinónimo de deportividad y máximo placer de conducción. El F8 Tributo se sitúa en esta gama como el vehículo de más altas prestaciones y, al mismo tiempo, de mayor disfrute.
El aprovechamiento máximo de la potencia de su extraordinario motor deriva de la mayor aerodinámica de su carrocería, gracias a la experiencia adquirida en competiciones con el 488 Pista.
El F8 Tributo sustituye al 488 GTB, incrementando el rendimiento, potencia, proporcionando mayor confianza en su conducción al límite y mayor nivel de calidad de vida a bordo. Cuenta con transmisión de doble embrague con 7 velocidades, mayor eficiencia aerodinámica (+10%) y la nueva evolución de Side Slip Angle Control (Control de Ángulo de Deslizamiento Lateral).
Sin la más mínima sensación de turbo lag y con un sonido único y cautivador, el nuevo vehículo ofrece facilidad de conducción y disposición inmediata de su extraordinario torque. Destaca la posición RACE del manettino, propia del “Ferrari Dynamic Enhancer” (FDE+), que permite llegar al límite de su conducción.
El volante con diámetro reducido es más deportivo y maniobrable. Además, es más liviano respecto al 488 GTB en 40 kg., mejorando la experiencia sin castigar confort interior.
De este modelo, el F8 Tributo adopta distintas soluciones orientadas a la gestión térmica del motor, tales como los radiadores delanteros inclinados hacia atrás, y las tomas de aire dinámicas del motor desplazadas de los costados a la parte lateral del spoiler. La nueva cubierta trasera realza el compartimento del motor, reinterpretando en clave moderna el elemento de diseño más distintivo del Ferrari V8 más famoso: el F40.
Las ranuras ayudan a extraer el aire caliente del capó sin afectar a la eficiencia del spoiler soplado, aún más evolucionado para aumentar la carga generada en la parte trasera del vehículo. El spoiler envuelve los pilotos traseros, bajando ópticamente el centro de gravedad del vehículo y permitiendo también el retorno del clásico doble piloto engastado en el cuerpo en el mismo color que la carrocería.
El interior del vehículo mantiene la inspiración de estilo “cockpit”, característico de las berlinetas de 8 cilindros con motor central-trasero, pero cada uno de los componentes del tablero, los paneles de las puertas y el túnel han sido sometidos a una actualización estilística. La nueva generación de HMI (interfaz de mando Human Machine Interface), con difusores redondos, nuevo volante y mandos, y nueva pantalla táctil de 8,8 pulgadas para el copiloto, mejora significativamente la satisfacción de conductor y pasajero.